Lograr entender a través del conocimiento, la vagina, su relación con el cerebro, el placer y la sexualidad, nos da la posibilidad de profundizar en el autoconocimiento, creatividad, felicidad y alcanzar esta sensación muy parecida a la libertad, este es el resultado de una investigación realizada por Naomi Wolf, una famosa critica, politóloga y escritora estadounidense.
Cuando la mujer logra conocer su placer, su vagina y sexualidad, por fin se da cuenta de la importancia de su apreciación, y trato respetuoso para ella misma, como un ser integral.
Este coctel maravilloso entre la vagina, el cerebro y sus reacciones químicas que producen su estimulación, llevan a la mujer, especialmente a elevar el grado de conciencia y dignidad que redundan en su sentir, proceder y desarrollo, poniéndola al nivel de una “diosa”.
La cantidad de ramificaciones nerviosas que tiene la pelvis, la vagina, la vulva, el clítoris, el ano, dan a la mujer la facultad de tener orgasmos varios y cada orgasmo se podría decir que es luz para su cuerpo, desarrollo y mente, que la hace brillar, como brilla luego de una relación sexual satisfactoria su piel, por ejemplo, su creatividad se expande, mentalmente hablando y sale con ganas de comerse el mundo.
Las mujeres somos tan variadas, diferentes y ricas, que nuestra anatomía difiere en cuanto a las cantidades y ramificaciones nerviosas tengamos en lugares diferentes como los ya nombrados, adicionalmente el cuello uterino y el perineo, en esto radica principalmente la diferencia en las respuestas sexuales femeninas, de ahí las preferencias tan variadas.
Cuando nos encontramos bajo una influencia positiva, nuestros sistemas se relajan y de ahí que las repuestas sean tan deliciosas, de tal manera que al estar con una estimulación contraria, de cualquier tipo, auditiva, táctil, visual, etc, que nos produzca estrés o molestia o miedo el cuerpo, no se excita, por tal razón el cerebro lo interpreta como situación de peligro y acto seguido se protege.
La oxitosina que es una hormona se libera en dicha situación, la positiva, la placentera y segura y nos vincula a establecer una relación de confianza, esto sucede durante un orgasmo.
También tenemos la dopamina que esta relaciona la estimulación con la excitación y el deseo, todo esto se envía a la glándula pituitaria que es en donde se producen las emociones.,
¿Pero qué relación tiene todo esto con nuestro tema?
Pues, nada menos y nada más, mientras una mujer está teniendo relaciones sexuales y se está encargando que estas sean deliciosas y placenteras, su vagina está enviando al cerebro información que influye directamente en su conciencia.
De ahí que separarlos, vagina y cerebro, cerebro y emociones y emociones y acciones es imposible.
Por lo tanto, el autoconocimiento y desarrollo sexual, redundará en la creatividad e identidad de las mujeres y acto seguido tenemos mujeres poderosas y exitosas, no solo en la cama sino en la vida y para vivir.